lunes, 23 de noviembre de 2020

Monseñor Diego Gutierrez Pedraza a 30 años de su partida

 

Escud Mons. Diego G. O.S.A.

El primer obispo de la Prelatura de Cafayate, integrante de la orden de San Agustin, llega a Buenos Aires el 10 de febrero de 1969,y de allí se traslada a un nuevo territorio eclesial en el NOA. El mismo fue creado, posterior a su arribo con la condición de jurisdicción eclesiástica de Prelatura. Este territorio,  integraba porciones de las provincias argentinas de Tucuman, Catamarca y Salta. Un 8 de marzo de 1969, junto al Sr. Arzobispo de Salta Mons. Carlos Mariano Perez, y el Pbro. Gerardo Ureta Prida- también de la Orden de San Agustin- partieron desde Salta hacia las nuevas tierras que serían mas adelante su hogar.

 La Prelatura de Cafayate cuenta con una extensión de 46.874Km2 con una población que ya supera las 48.500 habitantes. El entonces Padre Diego se le encomendó un 22 de febrero de 1970  la jurisdicción eclesial como Administrador Apostólico. La entonces nueva jurisdicción eclesial quedó con los siguientes  límites al Norte la Arquidiócesis de Salta; al sureste la Arquidiócesis de Tucumán y al sur la Diócesis de Catamarca y al oeste la República de Chile, siendo sufragánea de la Iglesia metropolitana de Salta. Su sede sería Cafayate, el templo curial de esta ciudad, dedicado a Dios en honor de la bienaventurada Virgen María, bajo el Sacratísimo Rosario como su Catedral. El 12 de Octubre de 1973 fue nombrado Obispo, siendo su ordenación episcopal el 16 de diciembre de ese año. El lema del flamante obispo fue "Con Todos y en todo Caridad". Numerosos testimonios dan lugar al accionar de este noble y grandiosos ser humano.

 Le llamaron el Apóstol del Valle Calchaquí, otros lo describen como un fraile sencillo, humilde, suave y firme en sus decisiones, sabio para vigilar su rebaño, observador comprensivo y ante todo un muy buen pastor. Es por todos conocidos que su interés en los jóvenes y su educación eran parte muy importante en su gobierno pastoral. Quizás una de las obras que se puedan celebrar mas es la gestión constante y diligente para que se estableciera la Escuela Técnica en Cafayate. Pero no fue la única obra destacada, muchas otras dedicadas a la promoción humana y cultural, sumadas a campañas de solidaridad,  una intensa labor catequetica y pastoral, animando siempre a las vocaciones nativas de forma diligente y afectuosa, son también importantes en su celebrada labor. Monseñor Diego, es difícil de sintetizar, un libro no es suficiente para detallar su trabajo y desglosar la profundidad de su persona, su compromiso con el pobre, el anciano, la cultura regional, atributos inspiradores para el pueblo que le fue confiado a pastorear. No solo al pueblo sino también para sus hermanos y hermanas religiosos de la orden de San Agustín y otras mas. 

En agosto de 1990 estando en España sufre un grave cólico, producto de una enfermedad cuya dolencia venia padeciendo y tolerando con mansedumbre. Aquel hecho confirmaría luego de rigurosos análisis, el diagnóstico del cáncer de estomago mortal que avanzaba ya sobre los diferentes órganos sin pausa. Aquella noticia fue tomada con mesurado ánimo y rápidamente se  preparó para retornar a Cafayate. 

En su retorno lo recibimos en la víspera del inicio de la novena patronal de N. Sra. del Rosario la Sentadita. Aquella recepción se realizó con mucho entusiasmo, sin embargo la enfermedad le obligó a retornar a Bs. As. y de allí a España repitiendo mansamente en su despedida: " Estoy en manos de Dios". 

Un 23 de noviembre de 1990, partía a la casa del Padre en la clínica Nuestra Señora de la Salud de Palencia, contando con 64 años de edad y 54 de vida religiosa. Nos relata el Padre Pablo  de la Cruz Hernado Moreno en ocasión de sus exequias: "Monseñor Diego ha sido el amigo de todos. Amigo, que nunca abandonó a su grey cafayateña. Solo la enfermedad del cáncer, que brutalmente le invadió y luego la muerte, pudieron arrancarle del lado de sus ovejas".

La iglesia cafayateña, como nos describe el Padre Pablo, añoramos su presencia con nosotros,  ansiábamos tener a nuestro primer Obispo entre nosotros. Dicha petición se rezó tanto que un 23 de noviembre de 2005, sus restos mortales ingresaron a Cafayate, durante el obispado de su querido compañero Mons. Cipriano García Fernandes O.S.A . Quizás los signos mas fuertes del cariño que despertó en todos nosotros sea como nuestro paisaje vallisto enriquecía su memoria sumando calles, instituciones y edificios con su nombre. 

Nuestro pueblo, nunca lo olvidó, aunque los años pasaron y las generaciones cambiaron  pedimos por él una y otra vez, buenas noticias nos traería el Señor con la declaración de Siervo de Dios. Pero quizás una de las mejores fueron las de aquel 8 de Septiembre de 2018. En la fiesta de la Natividad de Santa María Virgen, a las 19:30 hs en la catedral cafayateña,  allí daría inicio a la investigación sobre la vida, virtudes y fama de santidad del Siervo de Dios monseñor Diego Gutiérrez Pedraza OSA, esta vez de la mano de Mons. José Demetrio Jiménez Mariscal O.S.A. En esas mismas fechas iniciaría el jubileo por el 50 aniversario de nuestra Prelatura. 

 La investigación sobre vida, virtudes y fama de santidad continúan en medio de este actual marco mundial del que nuestra región no es ajena. Los testimonios  hasta el momento numerosos, irán en incremento hasta finalizar el proceso. Por esta razón pedimos a quienes se les concedió una gracia por medio de su intercesión contacte con la Prelatura de Cafayate.

 Acercamos a los fieles la oración mediante la cual pedimos que el Altísimo en Su Misericordia nos otorgue la bendición de contarlo entre la multitud de santos de nuestra iglesia universal.



Fuentes: 

Mons. Diego Gutierrez Pedraza. Primer Obispo del Valle Calchaquí. P. Pablo Hernando Moreno, O.S.A Ed. Guadalupe.

http://www.sanagustin.org/Dialogo_A_monsdiego.php

https://cantaycamina.net/siervo-de-dios-monsenor-diego-gutierrez-pedraza-osa-cafayate-argentina/

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